No te preocupes, Marcos, a veces soy poco transparente. Pretendía decir que, en el fondo, hubiese preferido quedarme en aquella cálida placenta...y no conocer este pringoso mundo! Saludos cordiales
Cualquier cosa menos prolífico y locuaz, Paz Cabanas afirma haber leído a algunos autores anarquistas, aunque no desprecia el perfume conservador del lacón con grelos. Persuadido de la estupidez del género humano piensa, no obstante, que gracias a Melville en América no está todo perdido. Le complace admitir sus errores, pero lo que nunca aceptará de su época es su mezcla de ruido y degradación: porque, inevitablemente, también acabarán afectando al río invisible de las palabras.
Déjate de historias.Lo que yo tengo entendido es que a la abuela le costó sangre sudor y lágrimas porque eras un bebé enorme.
ResponderEliminarTu caso fue sin duda más ominoso, que venías de pie y hubo que abrir el vientre de tu madre!
ResponderEliminarperdona venía sentada, e posición de leer el periódico
ResponderEliminarPeriodista tuviste que salir...
ResponderEliminarNo entendi el comentario, seo medio bestia.
ResponderEliminarMe llamo la atencion, por eso te escribo esto.
http://marcosliberatore.blogspot.com/
No te preocupes, Marcos, a veces soy poco transparente. Pretendía decir que, en el fondo, hubiese preferido quedarme en aquella cálida placenta...y no conocer este pringoso mundo!
ResponderEliminarSaludos cordiales
Me ha recordado a un bocadillo de calamares con tomate que me comí un día después de haber vomitado sangre.
ResponderEliminarHum...espero que los calamares fueran frescos.
ResponderEliminarVaya...! estabas genial en ese barco de agua cálidas, flotando, acompañado de ese música del corazón..pum-pum
ResponderEliminarMe ha encantado.
Muy bueno eso de la música del corazón...sí... Un abrazo.
ResponderEliminarotro para ti :)
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